Me aburria.....

La noche aun no había acabado. Debía encontrar a su presa. La cacería había durado ya más de 15 días y no parecía tener visos de acabar. Eran mil cazadores y solo había cinco presas. Según le había informado el último cazador con el que se había encontrado, de los mil que habían comenzado solo quedaban 98.
-"98 cazadores aun.....mejor dicho 97. La cabeza de ese imbécil al menos servirá para algo más que para dar información. 97 cazadores y dos presas en juego aun."-dijo Seraphan para sus adentros.-"Una de ellas es mía y la otra la matare para que me sea mas fácil la victoria."
Siguió corriendo por el bosque atento al menor indicio de movimiento a su alrededor. Poco después llego a un claro donde un riachuelo formaba una pequeña laguna. Se agacho dispuesto a beber cuando percibió una silueta en un árbol. Sin siquiera levantar la cabeza se llevo la mano al puñal que tenia en la bota y de un rápido movimiento el cuchillo le atravesó la garganta al cazador que había envenenado el agua de la lagunilla. Subió corriente arriba por el riachuelo hasta que llego a la cueva donde estaba el nacimiento del rió. Relleno su cantimplora y salio al exterior para continuar la persecución. Aun quedaban unas cinco horas para el amanecer que marcaría el final de la prueba.
Seraphan vio en la entrada de la cueva unas pisadas que solo podían corresponderse con las de su presa, y eran recientes.
Saboreo la victoria que en los siete años anteriores no había podido conseguir, ya que este año seria diferente. Las huellas salían de la cueva y se dirigían hacia una colina al norte del nacimiento, a no mas de una hora corriendo. Seraphan no espero más y se lanzo en busca de la presa que ansiaba.
Cuando estaba a punto de llegar al pie de la colina freno su carrera al ver a un grupo de cazadores vigilando la entrada de una cueva en la que se vislumbraba un fuego y junto a el la presa y el que parecía el jefe de la banda. Si la quería entonces debería matar a los 26 cazadores antes de que llegase el árbitro que le adjudicaría la pieza al patán sentado junto al fuego.
Llevo su mano derecha sobre su hombro y agarro la empuñadura de su espada Lightless, una espada que había pasado de generación en generación dentro de su familia y al fin, dos meses antes de la cacería, su padre se la había otorgado. Esa espada significaba su triunfo en la prueba de este año. Se decía que era la más poderosa y antigua que poseía su raza ya que databa de los tiempos en que los dioses habitaban entre sus hijos.
Desenvaino a Lightless por completo y su hoja negra pareció absorber toda la luz de los alrededores. Se agazapo detrás de la ultima línea de bosque frente a la que estaba la cueva, apretó la empuñadura y se lanzo hacia los que vigilaban la cueva con la espada por delante.



Ale, ay os dejo la primera parte. Opinad si teneis ganas....

Segunda parte de esta historia:

Seraphan salto la ultima línea de maleza espada en mano y se dirigió a toda velocidad hacia el grupo que aun no había terminado de reponerse de la súbita aparición. Los tres que había más cerca del recién llegado cayeron con el primer golpe de espada. El resto se apresuro a coger las armas y los escudos para matar al intruso. La espada negra, bañada en sangre, rezumaba oscuridad y odio. Seraphan la empuño con fuerza y se lanzo contra el grupo armado.
Una veintena de espadas intentaron alcanzar cualquiera de sus puntos vitales, ya fuese la garganta, el corazón o el vientre, pero las fintas y los esquives, junto con algún corte rápido, dejo el suelo plagado de cuerpos mutilados. Donde antes ardía un magnifico fuego, ahora solo quedaba un charco de sangre del que emergían troncos calcinados y sobre el cual flotaba el olor a muerte. Los buitres no tardarían en llegar.
De los tres que aun permanecían en pie dentro de la cueva salieron los dos que parecían de menor rango intrigados por la razón de que la hoguera exterior se hubiese apagado. Cuando sus ojos se acostumbraron a la penumbra de una noche con la luna oculta, retrocedieron unos pasos horrorizados por lo que tenían ante sus ojos. Con la mirada buscaron al culpable en los alrededores del campamento, mirando con esfuerzo por distinguir algún movimiento, pero cuando la luna salio de entre las nubes que la ocultaban, vieron junto al circulo de piedras, que momentos antes delimitaba el fuego, a una figura salpicada de la sangre de los muertos y que los miraba de manera evaluadora sosteniendo en su mano un fragmento de la oscuridad que se había atenuado.
Los dos guerreros dispuestos a vengar la muerte de sus compañeros pusieron la mano sobre la empuñadura de su espada. Dos cuchillos volaron raudos hacia las gargantas de ambos, pero solo un cuerpo cayo muerto. El otro había conseguido desviar la trayectoria del fatal cuchillo en el último momento gracias a la placa de metal que cubría su antebrazo. Desenvaino la espada saboreando la lucha que iba a tener lugar. Sabía que la espada de su oponente era la oscura Lightless y que por esa razón era imposible salir con vida de la batalla. Nadie que se enfrentase a esa espada era capaz de mantener su vida sujeta por mucho tiempo, pero ya que iba a morir, vendería cara su vida.
Seraphan los había visto salir y los escudriñaba desde la oscuridad que creaba el banco de nubes al tapar la luna. No los considero unos oponentes interesantes, por lo que decidió ocuparse de ellos mediante un simple lanzamiento de cuchillos. El interés que no habían despertado los dos guerreros surgió cuando uno de los dos fue capaz de ver el cuchillo a tiempo y lo desvió.
No hubo señal alguna, pero ambos respondieron de manera simultánea como si la hubiesen visto. Se lanzaron el uno contra el otro con las espadas por delante. El primer choque resonó en los alrededores. Mantuvieron un tira y afloja mediante estocadas que eran detenidas inmediatamente por el contrario, pero Seraphan era mas rápido. Cada vez que lanzaba una estocada abría una herida en el cuerpo de su oponente a pesar de que este las detenía con su espada y su escudo. El guerrero viendo que no podría aguantar mucho ese intercambio de estocadas lanzo un golpe alto que Seraphan se vería obligado a detener para no resultar herido. Sin embargo en lugar de bloquear el golpe salto hacia atrás esquivándolo y le lanzo un tajo al otro brazo, que sostenía oculto un puñal, cortándolo limpiamente. Era una técnica demasiado recurrida en los enfrentamientos desesperados. Tras el choque de las espadas el puñal se clava entre las costillas del adversario. Seraphan lo sabía y había actuado en consecuencia, tendiendo su espalda indefensa a su adversario, preparado para el siguiente movimiento de esa peculiar danza.
El guerrero estaba aterrorizado por haber perdido su brazo. Todo había ocurrido demasiado rápido como para poder sentir el dolor. Eso llegaría después. Ahora tenía ante si la espalda desprotegida de su enemigo. La venganza por sus compañeros estaba a un solo movimiento de su espada. Giro la muñeca para dirigir el filo en un corte mortal y lanzo el brazo con toda su fuerza.
La espada jamás llego a tocar a Seraphan. Un puñal que sujetaba con la mano libre y que acababa de arrebatar a un brazo recién caído atravesaba la cabeza de su adversario desde la mandíbula hasta asomar por la parte superior de su cráneo. La espada que se dirigía en mortal estocada hacia su espalda cayó al suelo, igual que el cuerpo que la había empuñado. Seraphan se irguió y escucho un aplauso a su espalda proveniente de la entrada de la cueva. Se dio la vuelta y el último adversario que quedaba en pie desenvaino su espada.
Una espada que consiguió que Seraphan se preocupase por primera vez desde que comenzó la prueba por su vida.

mola! espero que continues la historia!